En el umbral de la puerta te dejé
nos dejamos
la distancia en metros que dibujamos
comenzó a hacerse de minutos
y esa urgente vocación de extrañarnos
pasó a ser un puñado de extrañezas
¿quién eres, que ya no te conozco?
hasta tu tibieza es otra cuando pienso
en lo precario del origen de mis certezas
en lo infértil que me resultó tu matriz
y en lo vacío que se queda mi alma
sin tu aliento
no hay ya cariños prófugos
ni gestos que anuncien tu proximidad
la pasión se ha ido o se ha muerto
¿qué sé yo de tus abismos?
de pronto comienzo a verte
los defectos
en el umbral de la puerta te dejé
tú ya no estabas
jueves, 15 de julio de 2010
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